Diari d’Avinyó

Museo y Archivo Histórico Municipal Cabildo, Montevideo, Uruguay, marzo 2000.
Llegué a Barcelona en 1988, 12 años después la Intendencia de Montevideo me invitó a realizar una exposición en el Cabildo, en plena Ciudad Vieja. Volvía a mostrarle a mi gente el trabajo después de 12 años de ausencia. Me pareció oportuno realizar obra para la ocación. Realizadas sobre un soporte de madera contraplacada, relatan esos 12 años de vida a través de una trama de puntos, que como señales en un almanaque van dibujando un diario. Avinyó es la calle donde aun vivo.
Leonardo también guió mi trabajo con esta cita: La pintura nace de la dilatación de un punto. (Leonardo Da Vinci, Tratado de Pintura)

«Diari d’Avinyó, una enorme red de puntos focales constituída por combinaciones numéricas tendientes a abarcar con precisión una época con todos sus eventos, lugares, objetos, el color y los matices de sus sentimientos, la dirección, la velocidad o la intensidad del flujo de su itinerario vital, expresado en términos pictóricos apoyados en una refinada estructura de transparencias. El punto focal es el eje de este sistema de relaciones, el centro del centro de un exacto libro de viaje. Doce años distribuidos en un diagrama de doce puntos por doce puntos, un punto por mes, doce puntos por año y ciento cuarenta y cuatro puntos o capítulos, dotados a su vez de una concentración constructiva de relaciones, posibilidades combinatorias y niveles de acercamiento.Su sistema del recuerdo es expansivo y libre, regido por sus propias coincidencias en el número, misteriosamente exacto. El punto de partida es marzo de 1988, impensada ocasión del inicio del viaje. Bado vive y trabaja hoy en la calle de las Mademoiselles d’Avignon, en Barcelona, aceptando de buena gana la insólita precisión de sus azares. Marzo del 2000 cierra por casualidad el ciclo y para celebrarlo ha levantado un gran panel o mapa con toda su correspondencia postal y no indagaremos por el número de cartas».
Juan Carvajal Franklin

Diari d‘Avinyó Diari d‘Avinyó I Diari d‘Avinyó II Diari d‘Avinyó III Diari d‘Avinyó IV Diari d‘Avinyó V Diari d‘Avinyó VI Diari d‘Avinyó VII Diari d'Avinyó VIII Diari d‘Avinyó IX

4 respuestas a Diari d’Avinyó

  1. PASCHAL dijo:

    me encuentro cada semana con tu diari d´avinyó, justito abajo del club uruguay, las vueltas que da la vida y los cuadros y acá aparece el círculo otra vez!!!!
    10 años después los cuadros siguen dando vueltas del cabildo al paseo de la matriz y de ahí al club uruguay, no salen de las dos cuadras del lugar fundacional de la patria, tomá pa vos!!!

    • Claudio dijo:

      No me había puesto a pensar en eso. Es como que los cuadros quedaron atrapados en un bucle espacio temporal desde hace 10 años. Para quienes no lo saben, estos cuadros fueron expuestos en el Cabildo de Montevideo. De allí pasaron a la galería del Paseo a dos calles del Cabildo y ahora cuelgan de las paredes de un restaurante en la misma Plaza Matriz.

  2. Andrea Bado dijo:

    Recuerdo al ver estos cuadros aquella exposición como si hubiera sido ayer. Recuerdo que era una adolecente y que estaba en contra del mundo de los adultos, pero recuerdo también que tu mundo me atraía como pocas cosas, y recuerdo que fue muy fuerte la sensación de ver mis cartas plasmadas en una obra tuya.
    Siempre te admiré, al principio por haber sido el familiar que siguió otro camino distinto al de todos, la aventura de haberte ido y de vivir en Europa, luego al crecer y hacer mis viajes por conocerte mejor y hoy me doy cuenta que sos un gran artista.

    • Claudio dijo:

      Andrea, gracias por tu comentario amoroso. Diario d’Avinyó II es una pieza especial. La trama de puntos, la trama de tiempo, flota sobre un fondo de cartas de familia y amigos que fui recibiendo a lo largo de esos 12 años. Hacerlo fue un viaje a través de los textos de tantas personas queridas. Lo alucinante ocurrió al pegar las hojas sobre la tabla, las diferentes tintas de las cartas al mojarse viraban su color al violeta, a rojos, a verdes. De algunas el texto desapareció y de otras el color se disparó. Todo eso significó para mi una nueva lectura del pasado.

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